Fiona Sinclair había vuelto a casa para enfrentarse con su pasado y, cuando Andrew MacDougall le ofreció cobijo entre sus brazos, supo que ya era lo suficientemente madura y capaz para enfrentarse a un compromiso de por vida. Ese hombre tan atractivo le hacía desear algo más que protección. Ahora quería un marido y un hogar de verdad…
Andrew haría cualquier cosa para proteger su tierra natal y la mujer a la que amaba. Pero Fiona necesitaba algo más que un Príncipe Azul; y, aunque el destino de Andrew incluía muchas cosas, el matrimonio no era una de ellas…

Chloe Palmer lo sabía todo acerca de los deseos navideños, especialmente los de las niñas huérfanas, puesto que ella misma lo había sido. Pero aquellas navidades iban a ser diferentes. Había algo mágico en el ambiente. O quizás fuera Egan O’Brien, el atractivo constructor, el responsable de que volviera a sentir el espíritu de la navidad…

Era una perla tan perfecta que no tenía precio, pero quienes la poseían lo pagaban caro.

Liana Robeson era en ese momento la dueña de la Perla del Gran Precio, hasta que un día la joya desapareció al mismo tiempo que su hijo. Desesperada, Liana recurrió a su ex marido, Cullen Llewellyn.
En busca del adolescente, ambos se embarcaron en una emocionante odisea que los llevó hasta Australia, donde se vieron envueltos en un juego mortífero con un rival que haría todo lo que estuviera en su mano para poseer un tesoro que era tan fatal como perfecto…

Había nueve personas reunidas para la lectura del testamento de Aurore Gerritsen. Algunas eran de la familia, otras sólo extraños. Pero todos verían su futuro alterado para siempre cuando una vida entera de secretos comenzara a desvelarse. Aurore había dejado bien claras sus instrucciones: su testamento debía de ser leído durante cuatro días en su casa de verano de una pequeña isla de Louisiana. Aquéllos que no se quedaran serían desheredados. Pero, con una descomunal fortuna en juego, nadie se arriesgaría a desobedecer. Los problemas iban a comenzar cuando el abogado de Aurore distribuyera pequeños regalos, cada uno de ellos destinado a desvelar un secreto bien guardado de la matriarca.

Julia Warwick, hija de un legendario cazador y aristócrata de Virginia, había crecido en un mundo donde los caballos y la caza del zorro eran pasiones, y no simples pasatiempos. Ella, por su parte, descubrió la pasión con Christian Carver, un joven preparador de caballos. No obstante, Christian fue condenado por el asesinato de una joven rica y hermosa, y Julia, embarazada y desesperada, acabó casándose con un amigo que le ofrecía consuelo. Aunque la ceguera oscurecía el mundo de Julia, también le abrió los ojos a ciertas verdades ocultas. Verdades sobre su marido, su familia, sus amigos y el hombre al que amaba. Con el regreso de los recuerdos, un misterio salió a la luz… y dos amantes separados por fuerzas ajenas a su control volvieron a encontrarse…

Tessa MacRae se sintió atrapada en cuanto aceptó pasar el verano ayudando a su madre y a su abuela a arreglar la vieja casa familiar. Nunca había estado muy unida a aquellas dos mujeres, pero tenía la esperanza de que pasar un tiempo alejada de su marido la ayudaría a encontrar el porqué del fracaso de su matrimonio.
El verano comenzó con las tormentas emocionales que tan bien conocían las tres. Helen, la matriarca del clan, era dominante, mordaz e incapaz de demostrar afecto alguno.
La madre de Tessa, Nancy, parecía haber centrado su vida en trepar en la escala social.
Pero, poco a poco, Tessa entró en contacto con la historia de su familia, una historia llena de dolor. Y por primera vez en su vida, fue capaz de olvidar los resentimientos y ver a su madre y a su abuela como las mujeres valientes y luchadoras que siempre habían sido.

Tate Cantrell se quedó paralizada en la puerta de su casa, aislada en la montaña. Aquel desconocido armado era un preso que se había fugado de la cárcel. Estaba herido y necesitaba ayuda urgente.
Carl Petersen se había propuesto dar con el traidor que lo había vendido, pero una bala lo había herido y se hallaba solo en pleno bosque. No sabía que estaba a punto de encontrar a la mujer que iba a iluminar su existencia, la mujer con la que cumpliría una cadena perpetua de amor… Sin embargo, pronto tendría que huir de nuevo porque, si los encontraban juntos, podría no ser el único que pagara con su vida.