
Durante años, Jillian había luchado contra quien y qué es. Una sumisa. La sociedad pensaba que era débil pero ella sabía la verdad. A pesar de conocer la profundidad de su verdadera necesidad había luchado contra ésta hasta que conoció a Rob.
Como Dom experimentado, Rob inmediatamente la reconoció entendiendo lo que ella deseaba. La conexión entre ellos chisporroteó durante semanas mientras él la preparaba para su nueva vida como su sumisa. Sus exigencias aumentaban a diario y la necesidad que Jillian sentía por el toque de su Amo se hacía más fuerte.
Finalmente su día ha llegado y ella irá a él para averiguar de una vez por todas si la verdadera libertad radica en su rendición.