Callum MacGregor hipnotizado por el espíritu rebelde y la belleza de Kate, desea tenerla a su lado, y se la lleva prisionera con la excusa de pedir un rescate. Cuando sus dedos se deslizan por las sensuales curvas de la joven acurrucada junto a él en su caballo y percibe el aroma de su revoltosa cabellera, descubre que es el enemigo más peligroso de todos los que ha combatido. Callum intenta ignorar lo que siente y se promete no enamorarse de ella, eso significaría una traición a su clan. Sin embargo, le será imposible resistirse al destino y al ardor e inocencia de esa muchacha que a él, al Diablo, le devuelve las ganas de amar.
Defenderla fue su deber
Hábil con la espada y rápida con su ingenio, la rebelde escocesa Claire Stuart no puede ser domada. Y nadie puede disuadirla de rescatar a su querida hermana y salvarlas a ambas de matrimonios concertados… ni siquiera el atractivo Highlander que juró proteger a Claire. Su abrasadora mirada y sus fogosos besos la llevan al borde de la rendición, pero ella no pertenece a ningún hombre…
Seducirla sería su recompensa
Graham Grant ha tenido su cuota de muchachas. Pero nunca ha conocido una tan terca o tan hermosa como Claire… o una con planes tan desesperados y peligrosos. Ayudarla podría significar traicionar su honor, su país y más. Graham no puede reclamarla. Pero todo en él dice: “Tómala, hazla tuya, enséñale el placer y nunca la dejes ir”.